Luego del ataque de abejas que sufrimos buscamos la forma de deshacernos de esos insectos asesinos. Los bomberos demostraron ser inconfiables, así que mi papá llevó a la casa a un amigo del esposo de la señora de servicios domésticos, un tipo joven que tiene una oración para alejar a las abejas y sacar colmenas. Yo, escéptica a todas esas cosas imposibles de comprobar de forma científica y que rebasan la lógica, opté por quedarme dentro de la casa U_U (después de lo que viví quedé como traumatizada). Oí a un montón de abejas pasar por frente a las ventanas y luego un silencio insectívoro total.